sábado, 21 de mayo de 2011

El Agua y su Consumo

El  consumo adecuado y necesario de Agua es importante para las distintas funciones vitales que realiza nuestro organismo. 2 ½ litros de Agua, es necesario ingerir para reponer líquidos perdidos, 1 ½ litros perdido por medio de la orina, ½ litro por medio del sudor, ¼ de litro por medio de todas las secreciones y materiales de desecho de nuestro organismo y ¼ de litro acompañadas por las actividades de los pulmones y también el excremento. Hay que tener en cuenta que de los alimentos obtenemos 1 litro, y ¼ litro de la digestión; por lo tanto se necesita 1 ¼ litro para mantener sano nuestro organismo.

El Agua, estimula las funciones del sistema inmune, lo cual execra sustancias toxicas, lo cual asegura que las diferentes células que nos defienden de infecciones estén en óptimas condiciones. El Agua, estimula el orinar con frecuencia y ayuda a evitar infecciones en la vejiga. El consumo regular de Agua, ayuda a controlar el peso ya que calma la sensación de hambre y ayuda a regular el buen funcionamiento del hígado, el cual controla el metabolismo graso. También ayuda a eliminar el exceso de sal.

El poco consumo de Agua provoca serias complicaciones al organismo como la deshidratación ocasionada por diarreas, la cual es una de las principales causas de mortalidad infantil. La irritabilidad o cambio de temperamento se debe a la falta de Agua en nuestro organismo ya que las 40,000 millones de células cerebrales están compuestas por un 70% de Agua, por lo tanto al faltar Agua se pierde la capacidad de pensar de manera clara y funcional. Nuestra vida misma está regida por el Agua, sudamos para regular la temperatura y eliminar toxinas; también mediante el proceso de respiración se pierde Agua.

El Agua es absorbida principalmente en nuestro intestino delgado y el resto en el colon. La sangre compuesta de sangre viaja al hígado y luego viaja hacia el corazón y los pulmones. En el corazón y los pulmones el Agua tiene la función primordial de disolvente, lo cual permite el transporte de anhídrido carbónico de los alveolos a los pasajes bronquiales para ser exhalado trayendo entonces el oxígeno a los alveolos. Esto es posible solo por la disolución de estos gases en un medio líquido. La sangre enriquecida con oxígeno llega al ventrículo izquierdo del corazón siendo luego distribuida por todo el organismo.

De la arteria aorta se desprenden las arterias renales, las cuales se encargan de llevar sangre a los riñones, donde se produce la depuración de sustancias formando la orina. Regularmente se recomienda consumir 2 litros u 8 vasos de Agua diariamente para el buen funcionamiento de nuestro organismo, si se realiza alguna actividad física es necesario consumir mayor cantidad de Agua ya que se pierde mucho más líquido con la secreción del sudor.