jueves, 14 de julio de 2011

Las várices

Las várices, son dilataciones permanentes de una vena superficial profunda. Su origen principalmente suele darse por la obesidad, embarazo, tabaquismo, dieta deficiente o desequilibrada, factores hereditarios, pasar mucho tiempo de pie, alcoholismo y vida sedentaria.

Aunque pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo es más común que aparezcan en la parte inferior de las piernas. Las venas de las piernas tienen válvulas, cuando estas pierden eficacia la sangre se acumula en las venas y estas se hinchan.

En algunos casos Las várices no sobresalen de la piel ya que su hinchazón es interna pero de igual forma los síntomas son los mismos ya que la persona siente cansancio, piernas pesadas sobre todo cuando se permanece de pie por largo tiempo lo que también produce tensión. También puede provocar prurito en las piernas, lo cual hace sentir picazón, si la persona se rasca constantemente puede provocar a veces la formación de una llaga.

Algunas recomendaciones serían las siguientes: evitar el café, alcohol y té negro. Aplicar diferentes masajes para mejorar la circulación. Alternar entre baños con agua tibia y agua a temperatura normal para mejorar la circulación. Hacer ejercicios regulares como caminatas para mejorar la circulación en las piernas. Evitar el cigarro ya que la nicotina obstruye la buena circulación. Eliminar el sobrepeso ya que este provoca una mala circulación y forza el corazón. Beber como mínimo 8 vasos de agua al día. Cuando este sentado procure mantener los pies en alto y cuando este acostado ponga alguna almohada en sus pies para que queden un poco elevados. Mantener una alimentación sana, eliminando los azúcares, alimentos grasosos como las carnes rojas y de cerdo, mantequilla, las frituras, aditivos y conservantes así como las gaseosas, ya que estos alimentos producen gases y apenas tienen fibra, llenan la sangre de tóxicos y no favorecen a la circulación.

Puedes elegir entre estos 2 tratamientos con plantas medicinales:

Tratamiento con Sábila: para prepararlo abrir la mitad de una hoja de sábila y extraer el contenido gelatinoso; su dosis es aplicar el contenido gelatinoso sobre la parte afectada; la duración del tratamiento es hasta mejorar.

Tratamiento con Llantén: para prepararlo triturar la hoja fresca y agregar una cucharada por taza de agua; su dosis es aplicar la hoja triturada en la parte afectada 3 veces al día; la duración del tratamiento es hasta mejorar.